Crítica: Mamá (2013)


Siglo XIX. Una mujer escapa de un psiquiátrico tras matar a una monja que le había arrebatado a su hija. Perseguida por las autoridades de la época, termina acorralada en un acantilado con vistas a un lago. No tenía opción, saltó al vacío junto con su bebé.

La trama gira en torno a Mamá, un fantasma que cuida de dos niñas en el bosque. Así es como Guillermo del Toro quiere trasladarnos el terror más profundo. Pero, ¿realmente lo consiguió? Soy seguidor de las películas de terror, y sí he recibido algún susto, aquellos que no fueron exprimidos en el trailer de la película claro, porque parece que comprimen todos los sustos en el trailer, así que si no la habéis visto, os sugiero que no veáis la promo de ninguna de las maneras.

Tiene muy buena fotografía y efectos de luz, pero "Mamá", que parece tener síndrome de Down por su apariencia, aunque no lo constaten en la película, no está demasiado bien hecha, se nota demasiado el ordenador, llegando a cansar incluso con los efectos especiales, ya que no están muy bien logrados, al menos en la apariencia del propio fantasma.

En Jon's Life le damos tan sólo 3 estrellas.

"Mamá", no es una idea original. Está basada en un corto realizado en 2008 del mismo nombre, "Mamá", de  Andrés Muschietti, que sin duda, para lo breve que es, apenas tres minutos, con una escena del mismo largometraje, se ha convertido en el corto que más miedo haya podido causarme. Os dejo con el corto presentado por el mismísimo Guillermo del Toro:



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